Año nuevo, vida nueva
Sí, después de la recopilación del 2012 aquí estoy de nuevo. Un año que empezar ha empezado bien. Tampoco pedía mucho, solo ser feliz y pensar un poco menos y actuar un poco más. Parece que este mes de enero ha borrado todos los errores que cometí el año pasado, aunque haya aprendido de todos ellos. Nuevas personas me acompañan, y las de toda la vida siguen ahí, bueno, todas excepto una. De eso sí que me arrepiento, lo sé y lo siento porque fui imbécil. En fin... Ojalá todo siga como hasta ahora, que siga amaneciendo con algo en mente, con algo que me haga sacarme de la cama. Sí señores, este 2012+1 pinta bien.
Tan lejos, tan cerca
Quizá vaya siendo hora de ponernos al día, de preguntarnos qué tal nos va ahora que ya ni nos miramos. Quizá sea tiempo de retomar aquello que dejamos perdido por ahí una tarde fría de septiembre... Aquello que ya no está. No sé como tú lo ves, ni lo que piensas, ni quién eres ahora. Sólo sé que has cambiado, y no sé si para bien. Quiero que me recuerdes, que nunca te olvides de mí, que cuando tengamos 80 años sepa que estás bien, que conociste a alguien que te ha hecho feliz. Si es que soy idiota, si es que por más que lo intento no puedo sacarte de mi cabeza... Explícame por qué, porque te prometo que yo no lo entiendo. Y aunque me contradiga totalmente, quiero, necesito que te largues lejos, lejos de mi, donde yo no pueda ni verte, ni saber que existes. Dicen que para sanar una herida hay que dejar de tocarla, y a mi herida ya no le queda ni un año de cicatrización.
Parece que sea mentira que desde el día que nos conocimos haya pasado tanto tiempo, tantos meses de verano sin pena ni gloria, tú por tu lado, yo por el mío, sin hacernos lo que se llama, ni puto caso. Es verdad que te notaba distinto, raro, diferente conmigo y con los demás, pero ahora sé que esa razón llevaba y lleva mi nombre. Espero que la magia dure hasta agosto, y te lo digo de verdad así que no tengas miedo a creerme porque sólo te pido que confíes más en mí. Me estoy dando cuenta de que me fastidia verte por ahí con tus amigas, con mis amigas, algo que no entiendo y algo que no me pasaba desde hace mucho tiempo...
"Hola, ¿sabes quién soy?" Hola, sé quién eres y sé lo lejos que estás. Que no será ni una hora, o a veces sí dependiendo del tráfico, pero es que estás tan lejos... Y es que tampoco sé si lo que me prometiste lo estás cumpliendo, porque parece ser que a todas les estás prometiendo el mismo cielo. Quiero confiar en ti, pero tu fama y tú me lo impedís, es que no sé ni lo que haces ni lo que dejas de hacer, y es que cada vez que me da por cotillearte aparece el nombre de más y más tías... No te estoy pidiendo que cambies por mi, si no que me quieras algo más de lo que me dices.
Bueno, bueno, vamos a hablar un poco de ti que sé que te hace gracia, y bueno, no sólo a ti... Cuando un amigo de cuyo nombre no quiero acordarme me dijo cómo eras, lo que hacías y cómo tratabas a las tías, decidí por nuestro bien no creerle, pero es que ahora me he dado cuenta de que me engañé a mí misma... Me lo estás poniendo fácil. Fíjate si hay tías por el mundo que tú vas a las que tienen novio... Ok, todo muy ok. Pero en fin, qué te voy a decir, haz con tu vida lo que quieras, si total, la estás desperdiciando igual. Cómo te has echado a perder, yo, que te tenía como alguien del quien enamorarse...
Este es un tema del que todo el mundo quiere saber pero del que todo el mundo quiere salir inmune, y siendo como sois lo tenéis difícil. O se quejan de hablar a las espaldas cuando los otros se van o van presumiendo por ahí de que lo dicen todo a la cara. ¿Todo? Claro, toda la hipocresía que llevan encima. Y mientras tanto yo sigo a mi bola, dejándome llevar, sin que nada me afecte...
"Por ti, por mi, por volverte a ver."
1/2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario